Finalmente, es hora de pedirle a Dios las cosas que necesitamos para nuestra vida física y nuestra salud. Todo lo que tenemos es un regalo de Dios. Él nos dará lo que necesitamos, incluso si no lo pedimos. Entonces le pedimos lo que necesitamos hoy. No necesitamos preocuparnos por el mañana. Dios nos cuidó ayer. Sabemos que Él nos cuidará mañana. Esta es una oración pidiéndole a Dios confianza de que lo que Él nos da es lo mejor.